La película de Paula de Luque, protagonizada por Julieta Diaz y Osmar Nuñez, narra cómo comienza ese romance entre dos personajes que marcaron la política argentina del siglo XX. La directora confirma que “en Juan y Eva no hay disfraces, ni imitaciones. Ellos trabajaron a cara lavada. Julieta usó una pequeña base de maquillaje sólo por la alta definición. No buscamos recrear a los personajes sino reinterpretarlos”.
Nuñez, que en el film interpreta a Juan Domingo Perón, analiza: “la película se mete en un tema pesado. Hay demasiada información y tanto hecho ya sobre Perón y Evita”.
“Juan y Eva” abarca el año y medio entre el terremoto en San Juan de enero del ’44 y el 17 de octubre del ’45. Está encerrada entre dos cataclismos: uno es natural y el otro, social. Estamos acostumbrados a ver a Perón y Eva a partir del peronismo. Y mi película termina el día que nace el peronismo. Es una época de ellos que nunca fue transitada”.
“Siempre se partía desde Eva para hablar de ellos. Acá me parece que el foco es muy distinto”, completa Nuñez. Julieta Díaz lo interrumpe: “en el rodaje hacíamos un chiste donde Osmar reclamaba su comedia musical. Teníamos hasta las canciones hechas”.
Osmar, entre risas, argumenta: “uno trabaja desde lo que necesita el director, sin tener en cuenta versiones anteriores. Si aparecen las comparaciones y se habla del ‘sexto Perón’ o ‘la décima Evita’, eso corre por cuenta de los demás.” “¿Qué número de Romeo y Julieta va?”, agrega Díaz. Y dice: “en el Teatro San Martín, cada dos años, se repiten las mismas obras... Cuando se dice ‘esa es otra película sobre la dictadura’ yo pienso que es así, es otra película. Es una interpretación distinta”.
De Luque explica desde dónde filmó Juan y Eva: “detesto el maniqueísmo. Todos tenemos contradicciones, puntos de mucha luz y de oscuridad. Momentos de nobleza y de mezquindad. Esta no es una película peronista. No se dice que Perón es bueno y todos los demás son malos. La antinomia peronismo-antiperonismo se funda recién el 17 de octubre del ‘45. Y eso a mí no me corresponde. Ese es el momento exacto en el que yo me voy del cine”.
Fuente: Clarín.com
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