
Mañana se estrena en los
cines de la ciudad de La Plata “Adoro la fama”, un film de Sofía
Coppola inspirado en una historia real: una banda que, fascinada por el
glamour, rastreaba por internet a sus blancos famosos (entre ellos Paris
Hilton, Orlando Bloom y Rachel Bilson) y llegó a sustraer de sus casas más de 3
millones de dólares en objetos de lujo.
Esta película, que cuenta con las actuaciones de Israel Broussard, Katie Chang,
Emma Watson, Leslie Mann, Taissa Farmiga, Erin Daniels, Nina Siemaszko y Gavin
Rossdale –además de los cameos de Paris Hilton y Kirsten Dunst–, fue estrenada
este año en el Festival de Cine de Cannes. Hace un par de semanas se estrenó en
Buenos Aires y ahora podrá verse en La Plata, en Cinema Paradiso, a partir de
mañana.
En cuanto a la trama, entre 2008 y 2009, las casas de varias celebridades en
California fueron robadas. Paris Hilton, Lindsay Lohan, Miranda Kerr, Megan Fox
y Orlando Bloom, entre otros, descubrieron que alguien había estado en sus
mansiones y que les faltaban pertenencias.
Con el tiempo, la policía descubrió que había una banda detrás de los asaltos:
la “bling ring”, según la bautizaron los medios de comunicación.
Los ladrones eran jóvenes que utilizaban Internet para conocer la agenda de las
estrellas y para ubicar sus casas en el mapa: para obtener sus direcciones
recurrían a Google Maps y Web Sites como TMZ y www.celebrityaddressaerial.com.
Con la información en su poder, organizaban sus golpes, a los que denominaban
“ir de compras”.
En base a estos sorprendentes hechos reales y al trabajo de la periodista Nancy
Jo Sales, la directora y guionista Sofia Coppola creó la película Bling
Ring (presentada en el mercado latino como comoAdoro la fama).
Sofía Coppola comenzó a desarrollar el argumento de este proyecto
cinematográfico a partir de un artículo que leyó en Vanity Fair, titulado: “The
Suspects Wore Louboutins”, acerca de un grupo de adolescentes obsesionados con
la fama.

La directora contó en sus declaraciones a la prensa que trató de “empatizar”
con los jóvenes delincuentes y “no juzgarlos”. Por eso en su película, aunque
no dice que los robos “estaban bien”, no intenta decirle al espectador “lo que
tiene que sentir”. Coppola dijo que quiso mostrar como la “cultura” puede
influenciar a los adolescentes que no cuentan con “valores fuertes” en la
familia.
Fuente: Diagonales